Si bien en la previa se podía entender que era un partido son equivalencias en contra del cordobés siempre se alberga la esperanza de la resurrección, pero no…
Jueves 12 de enero
G y E Comodoro 121 – 89 A. D. Atenas
Parciales: 1) 22-30, 2) 31-10 (53-40), 3) 29-27 (82-67), 4) 39-22
Gimnasia: Sebastián Orresta 4, Tyrone White 6, Iván Gramajo 14, Yoanki Mencia 46, Gerard De Vaughn 13 (fi) Wayne Martín 11, Ramiro Stehli 3, Ángel Reyes Cuevas 3, Marcos Chacón 0, Agustín Barreiro 16, Facundo Vázquez 3, Cristo Bonazebi 0. DT.- Martín Villagrán.
Atenas: Javion Blake 19, Federico Mariani 14, Dominique Morrison 12, Fabian Jaimes 8, Omar Cantón 22 (fi) Alejandro Konsztadt 6, Guillermo Díaz 12, Deión McClenton 4, Máximo Araujo 2, Octavio Sarmiento 2, Matías Stanic 0, Erick Mecías 0. DT.- Elian Villafañe.
El primer parcial fue un espejismo, en referencia a lo largo de todo el juego, en los primeros diez el cordobés dejó ver buen juego y la esperanza de encontrar un rumbo ganador, nada Más y nada menos que ante el puntero y en su casa, no se agrandó solo se hizo presente y eso para estos tiempos de Atenas no es poco.
Pero siempre hay un, pero… a los tres minutos del segundo cuarto ya perdía por dos (34-32), después de un parcial 12-2. Momentos sin gol, sin defensa, sin confianza… bien aprovechado por los de Villagrán, en el tercer parcial mejoró lo ofensivo, pero siguió inoperante en defensa y así no se puede ganar, la diferencia ya era de 15 (82-67) y en el último coletazo del juego, el local dominó a placer y saco máximas diferencias